Estoy yendo el libro LUZ DEL MUNDO escrito por el periodista alemán Peter Sewal, que contiene básicamente una serie de entrevistas al papa Benedicto XVI.
Es una delicia.
Y quiero compartir una cita especialmente interesante.
Pregunta el periodista: Según explicó Usted, el ministerio de Pedro garantiza la coincidencia con la verdad y la tradición auténtica, y la comunión con el papa es condición para la ortodoxia y la libertad. San Agustín lo expresó con la frase: –Donde está Pedro está la Iglesia, y allí está también Dios–. Pero este dicho proviene de otra época y no es preciso que tenga validez en la actualidad.
Respuesta:Esa frase no reza así y no fue formulada por San Agustín, pero ese punto podemos dejarlo aquí en suspenso. De todos modos, es un antiguo axioma de la Iglesia católica. Donde está Pedro, está la Iglesia. (la respuesta continúa)
¡Qué elegancia!, ¡Qué erudición!
Tan solo leer estas frases, hizo brotar en mí una sonrisa. Cuando estamos en una conversación de cierto nivel, como las que suelen presentares en los foros de mexicolegal, o en ciertos medios sociales, es común que una persona inicie atribuyendo a la otra algo que –dice que dijo– y, como en este caso, regalando la conclusión que espera de su contraparte. en este caso, puedo imaginar la naturalidad, la sencillez y la inteligencia de Benedicto XVI que, a botepronto desarma el argumento y al mismo tiempo no avergüénza a su interlocutor; acto seguido responde, con verdad, pero sin los matices que le fueron presentados. La respuesta es magistral, no solo por lo que dice, sino por lo que deja entrelíneas. Este hombre tiene un intelecto que teje tan fino y tan preciso que tenemos mucho que admirar y aprender.
