General
Comun
Penal
Administrativo
Civil
Laboral
Tareas
Formatos
Editorial
Directorio
Moneda de Plata
MexicoLegal

Contacta a los mejores abogados

Videos

Cargando...

Publicidad

E-11
02/12/19
06:26:24

Ideología de Género... absoluta estupidez.

El derecho es una ciencia, la Justicia, su objetivo.

La Justicia existe aunque no haya leyes.

Esto implica que, para acceder a la justicia de manera organizada y no meramente intuitiva, las sociedades pueden promulgar leyes y procedimientos que garanticen un método ordenado de buscarla.

Lo antedicho nos coloca ante una realidad deontológica Primero es la Justicia, después el derecho. De ahí una consecuencia el derecho es más perfecto cuanto más se acerca a la justicia y menos perfecto cuanto más se aleja de ella.

De ahí se derivan dos principales ramas de pensamiento jurídico, El Ius naturalismo, y el positivismo.

El Ius naturalismo sostiene que el orden y la justicia preexisten a la legislación y que ésta, deba adecuarse a la naturaleza, buscarla bajo esta óptica, el derecho es siempre perfectible y es mas acrisolado cuanto más se acerca al concepto de justicia. Desde esta posición, las leyes humanas no son valores absolutos, ya que pueden resultar imperfectas o incluso contrarias al derecho natural.

En contraposición existe el Ius positivismo, esta corriente de pensamiento sostiene que la Ley es la fuente del derecho derecho positivo o derecho vigente y por extensión, lo que está en la Ley es lo justo, se cual sea su contenido. Para un Ius positivista el axioma es simple Si está en la Ley es justo y debe obedecerse a rajatabla.

Los Ius positivistas suelen ser los poderosos. Acaso no es obvio que quien detenta el poder considere ventajoso declarar que las leyes que ha decretado deben ser obedecidas sin discutir. Claro, el Ius positivismo es el arma de los tiranos.

En cambio, el Ius Naturalismo es la conciencia del jurista y del hombre. Reconocer que existe un orden superior al que se debe aspirar, en la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos se reconoce el sentido Ius Naturalista en la parte final del artículo 14 cuando dice En los juicios del orden civil, la sentencia definitiva deberá ser conforme a la letra o a la interpretación jurídica de la ley, y a falta de ésta se fundará en los principios generales del derecho.

Los Principios Generales del Derecho, es sinónimo de derecho natural.

No es nuevo sin embargo, el conflicto entre ambas posturas. Los abogados, los verdaderos abogados, comprendemos perfectamente la enseñanza en la tragedia de Antígona de Sófocles Luchar por la justicia o sucumbir ante leyes injustas.

Y es que siembre ha habido charlatanes del derecho, personas que creen que su imaginación es superior a la naturaleza.

En el estado norteamericano de Indiana, 1897, un matemático aficionado llamado Edwin J. Goodwin creyó que, sugirió un proyecto de ley que presenta una nueva verdad matemática y que es ofrecido como una contribución a la educación que solo podrá ser utilizado por el Estado de Indiana en forma gratuita sin necesidad de pagar ningún tipo de royalties, siempre y cuando sea aceptado y adoptado en forma oficial por la legislatura en 1897.

El texto del proyecto consiste en una serie de aseveraciones matemáticas falsas son típicas de un delirante de las matemáticas. Y que en resumen pretendía que Pi sería igual a 4, para facilitar a los estudiantes lidiar con problemas matemáticos sin tener que usar el irracional valor de PI de 3.1416 en realidad esto es una aproximación.

Huelga decir lo absurdo de esa postura.

Pero charlatanes no ha habido solo en el siglo XIX, ni en el XVI, también en el siglo XXI los hay.

Y la charlatanería suele tener dos raíces La simple ignorancia, o el afán de poder.

La ideología de género, es el máximo exponente de estolidez jurídica actual y solo los muy muy muy ignorantes no solo en derecho, sino en simple semántica pueden transformar el párrafo del artículo 4 constitucional que dice ...La mujer y el hombre son iguales ante la ley.... a la siguiente aberración ...el hombre y la mujer son iguales entre sí....

No, los nombres y las mujeres somos diferentes y complementarios.

La absurda y depravada ideología de género terminará como todas las aberraciones, sepultada por la realidad y sus postulados encontrarán el merecido fin de Creonte, tristemente, habrán dejado miles de víctimas en el camino, hombres y mujeres confundidos por tanta falacia.

Los verdaderos abogados tenemos el deber de pronunciarnos en favor de la Verdad.